Luego de los sucesos del 27 de abril de 1810, cuando Barcelona se separa de Cumaná y declara su independencia y se instala una Junta Provincial, presidida por el teniente coronel Gaspar de Cagigal, ocurre un hecho que despertó la curiosidad de los habitantes de la Sultana del Neverí. El 16 de julio de ese año, Gaspar de Cagigal asiste a un banquete ofrecido por los residentes catalanes de esta ciudad. Luego de haber salido de la casa de dos plantas, ubicada en la calle Juncal de Barcelona, cerca de la catedral, sintió fuertes dolores estomacales, perdiendo el conocimiento. Fue trasladado a su residencia de la calle Bolívar, cerca del río Neverí, donde falleció a los tres días, siendo sustituido por el teniente coronel Pedro Obregón, quien falleció en iguales circunstancias el 13 de septiembre de 1810.
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