Según relatos de la historia, el 27 de septiembre de 1640, se realizó el primer bautizo en tierras de Barcelona. Correspondió al sacerdote Andrés Padares Gallardo, cura y vicario de esta ciudad, colocar óleo y crisma a un indio adulto.
Estos oficios se realizaron en el mandato del Sargento Mayor Franco Berrecal de Ocampo, Gobernador y Capitán General de la Nueva Barcelona.